Crónicas Conciertos 2014



  • Pués lamento decir que sí pasó, pero creo que solo unos cuantos pudieron disfrutarlo ya que se trató de un concierto acústico en una casa, había varios afortunados de este foro amigo.



  • vaya…
    pués nada... seguiré esperando a que toque en una sala de Barcelona...



  • El viernes tocaron Femi Kuti & the Positive Force en Madrid. Lo primero que me soprendió fue la relativa escasa afluencia de público y luego la puntualidad de la banda en salir al escenario, estoy seguro de que mucha gente se perdió el comienzo del concierto. Lo de la puntualidad supongo que tuvo que ver con el hecho de que al día siguiente de madrugada tenían que volver a Lagos, pero lo de la falta de gente no lo entiendo muy bien, pero pienso que es más por desconocimiento y pereza para conocer cosas diferentes por parte de la gente, ya que el fiestón que se vivió el viernes en el Madrid, a cualquier persona con un poco de criterio y que le guste la música, lo huiese disfrutado mucho. Y por sólo 20€.

    Había 9 músicos sobre el escenario y 3 bailarinas/coristas que entreneían al personal meneandose de forma muy sexy. Femi venía a presentar su último disco publicado en 2013 "No place for my dream". No conozco su discografía, pero este disco lo compré hace unos meses y me gustó desde el primer momento, creo que siendo fiel al mejor afrobeat creado por su padre, con letras ingeniosas y reivindicativas, ha sabido adaptarlo con acierto a los formatos que demanda el mercado acortando la metraje de los temas, de manera que ningún tema supera los 7 minutos, aunque no creo que esto sea algo nuevo en sus discos.

    Femi es un líder y lo demuestra sobre el escenario, dirigiendo a su banda con mano firme, eso evidentemente no lo ha aprendido solo. Al igual que Fela, le gusta toca el saxo alto y los teclados, pero también toca el saxo soprano y la trompeta en algunos temas. El concierto duró sólo 2 horas, con el bis incluido y creo que todos nos quedamos con ganas de más. De las canciones del último disco tengo que destacar la que da nombre al disco "No place for my dream", "The world is changing" y "Politics na big business" y el momento piel de gallina fue cuando tocaron "Water no get enemy". Hay que decir, que el mensaje de sus letras encaja muy bien con la situación que estamos viviendo en nuestro país. Es un placer ver que los hijos de Fela han conseguido mantener su legado de la manera en la que lo hacen.



  • Con la presencia de Femi Kuti en Barcelona hice el gilipollas de forma sideral: el miércoles pasado lamenté no haberle ido a ver, pensando que tocó el jueves de Semana Santa…y tocaba el pasado jueves. Se me están fundiendo las neuronas, creo.

    Suertudo, untitled! (aquí nos clavaban de 30€ a 40€, los chupópteros del Guitar Festival -o del BARTS, o el propio Kuti, o todos juntos-).



  • 21 eurots pagué yo. Había descuento con el carnet de la promotora, de esos que haces por internet al momento.

    En términos absolutos, bolazo del quince aunque el sonido no estaba muy pallá. La voz muy alta y los metales muy bajos, aunque quizás es mi gusto. Poca sutilidad y demasiada brocha gorda, para mi gusto también. Es decir, en términos relativos, mucho mejor el Femi de hace cinco años o su propio hermano.



  • Aquí en Madrid el concierto empezó con un sonido bastante malo, mucha brocha gorda como dice pulpo, pero luego se fue colocando todo en su sitio. Aunque puede que los lingotazos de ron también ayudasen a ello. Yo entiendo que estos bolos estaban subvencionados porque sino ya me dirás tu.



  • Amigos castellonenses y bilbainos: no os perdais a Scott and Charlene's Wedding mañana y pasado respectivamente. Lo tienen, lo tienen mucho. Sonido molón, actitud que te cagas, canciones de puta madre… Te traen a la cabeza todo lo GUAY con su fraseo slacker, su guitarra haciendo riffs un microsegundo fuera de ritmo que hace que suene todo cojonudamente.
    El tipo de bolo que ves con 16 años y tienes claro que eso es lo que quieres hacer en la vida



  • Al fin, años después, pude ver a The High Llamas en un minúsculo escenario de un pub de Islington llamado, eh, the Islington. Tras un retraso respecto a la hora de la entrada de dos-tres horas (según se vea) salió Sean O'Hagan y su troupe actual al escenario, cinco músicos en total, a hacer un largo repaso por toda su carrera, que desgraciadametne tuve que cortar a la hora y cuarto porque había quedado. Y desde luego son unos músicos como la copa de un pino, por si su CV no lo demostrase ya, y O'Hagan es majísimo, cercanísimo, humildísimo y dan ganas de abrazarlo todo el rato y adoptarlo y que te cante al oído con su guitarra. Pero sobre todo lo que demostró el concierto de ayer es que, una vez destripas las canciones de los High Llamas de los vientos, las cuerdas y triquiñuelas, algunas canciones resisten como maravillosas y otras no tanto.

    Las que aguantan mejor son las del infravalorado Snowbug: Bach Ze y Cookie Bay (no escuché bien, pero se la dedicó a dos personas, y espero que Mary Hansen fuera una de ellas) son una auténtica belleza, aunque en la última empezaban a notarse las limitaciones vocales de O'Hagan, y el otro punto álgido fue "Ill Fitting Suits" donde sacaron dos vientos a hacer el estribillo. En la hora y cuarto repasaron bastante de éste, algo suelto de Hawaii, bastante de Guideon Gaye y NADA de Beet Maize&Corn o Can Cladders, sus dos discos con más pop de toda la carrera. Y por supuesto se detuvo en el último, Talahomi Way, que es tan aburrido en directo como esperaba (en el disco aguanta por la producción basicamente).

    Y eso, él es majo, el público en general respetuoso, pero espero que cuando me fuese cayeran "Nomads", "Rollin'" o "Checkin in Checkin Out", que absurdamente no estaban en el repertorio a favor de una serie de temas que, desprovistos de orquestillas, sonaban demasiado parecidos - y con la misma resolución de fade out, algo con lo que bromeaba el mismo O'Hagan. Quizás también les notaba cansados, y es que el retraso nos mató a todos, sin duda. Aún así, concierto muy bello que me hizo preguntarme, una vez más, por qué han pasado tan poquito por España (o al menos por Madrid).

    EDIT: veo que sí han pasado por Madrid pero cada vez que vinieron me coincidió con algo mayor - la última vez, con El Proyecto.



  • Comentar tambien que poco a poco me va creciendo el concierto en la memoria, y voy recordando un "Triads" fabuloso. Tengo un mono tremendo ahora de ellos.



  • Gracias por la crónica, Risings! En los cinco años o así que lso escucho creo que en el área de BCN sólo tocaron en el festival este en Vilanova



  • ¿Alguien ha visto a los Fuzztones estos días por la península? ¿Qué tal?



  • Una de las cosas buenas de vivir en Madrid es que un día por la mañana te dice un colega que va a ver a una banda de hard psicodelico de los Angeles donde esta la nueva bajista de los Pixies. Los escucho en el Spoty y dices joder pues como molan. Si en disco son bastante parecidos a los Black Angels. En directo tiene un toque más gamberro y salvaje. Que un formato trío llegue a esas cotas de sonido dice mucho como músicos. Eso si el maquina me parece la guitarra, voz y cerebro de la banda que lo borda en torrenciales sacudidas eléctricas de psicodelia a guitarrazos. Siguen de gira The Entrance Band por la peninsula, no se los pierdan si pasan por su ciudad



  • increíble el concierto. hacía años que tenía ganar de ver a Guy Blakeslee (me jodió mucho cuando suspendió hace ocho o nueve, aunque entonces era él solo como Entrance y lo que hacía era bastante más blues y menos psicodelia que ahora) y me fliparon. que manera de tocar los tres y menudo final con esa versión larguísima de Fine Flow.

    por cierto, el mes que viene también saca su primer disco en solitario con su nombre, es un rollo diferente pero tiene muy buena pinta: https://soundcloud.com/everloving/guy-b ... kneel-pray



  • Acojonante el concierto de ayer de Boo Boo Davis. Sonidazo en la Boite, que estaba medio llena. Grupo y público entregados desde el primer tema. Batería, guitarra y Boo Boo a la armónica y al cante. 2 horazas de blues rock con sabor a bourbon.



  • Entre los popes del rock en castellano, Andrés Calamaro es seguramente el que tiene una aspecto menos distinguido, la fuerza vocal más justa, y, sobretodo comparado con Bunbury o Loquillo, el que peor se mueve sobre un escenario, gesticulando de forma errática, dubitativa, e incluso patosa durante la interpretación de sus temas. Pero resulta menos calculador, es espontáneo e intuitivo en sus movimientos, frasea a su bola, y su cuerpo delata la convicción con que cumplió el canónico sexo, drogas, y rock'n'roll durante el siglo pasado. Tiene esencia, y rebosa carisma. Algo así como si Keith Richards se hubiera emancipado de los Stones, y hubiera formado su propia banda, pero en versión latinoamericana.

    En una sala Razzmatazz con todos los tickets vendidos pero, extrañamente, espacio bastante razonable incluso en la zona delantera de la pista, el músico argentino demostró que ya sabe gestionar su cancionero convenientemente para evitar los momentos muertos a lo largo de más de dos horas de actuación, como sucedió de forma notable anoche en Barcelona, y permitirse el lujo de dejar en el tintero, y es que no caben todas, favoritas como “Cuando te conocí”, “Tuyo siempre”, “Mi gin tonic”, o “Media verónica”, únicamente pensando en su material en solitario. Suena a perogrullada, pero deja de serlo cuando recordamos que sus dos últimas actuaciones en la sala catalana hicieron gala de desequilibrio (año 2008, acumulando todos los temas nuevos durante los primeros 40 minutos de actuación) o, aseguran, un caos más que acentuado (año 2010, empezando su bolo media hora antes de lo previsto, y con canciones cortadas a mitad de interpretación e inesperados arrebatos a cappella).

    Girando por primera vez acompañado de visuales (se hizo uso de creaciones especiales, videoclips, y modificaciones de la emisión en vivo del concierto), bandana en la frente, calamar de peluche en el pie de micro, y soplando un extraño saxo (según explicó tras un sorprendente interludio instrumental jazz-rock en el que presumió -con razón- de banda, como homenaje a la 'peculiar' primera experiencia de Ornette Coleman en Argentina –> http://100volando.blogspot.com.es/2009/05/ornette-coleman-en-buenos-aires.html -detalles en los comentarios del artículo-), AC abrió su actuación sin miramientos, recurriendo del tirón a canciones como “Output Input” (el mejor tema inicial que tiene junto a “Alta suciedad”…la cual no por nada abrió el bis), “Te quiero igual” (de las más coreadas y vitoreadas por el respetable), “Crímenes perfectos”, y una recuperada “A tus ojos” de su 'etapa Rodríguez' (de esa época sonarían asimismo “Todavía una canción de amor” y, como no, “Sin documentos”).

    Caldeado el ambiente, Calamaro focalizó la atención en su muy digno nuevo disco, “Bohemio”(2012), seleccionando además tres temas que muy probablemente sobrevivirán a la actual gira promocional como son los singles “Cuando no estás”, “Rehenes”, y la pieza titular, bajando el listón, eso sí, con la menor “Nacimos para correr”. Con un sonido bastante atropellado pero salvable (especialmente en los temas más enérgicos), y dando cancha únicamente a la vena rock del músico, el concierto adquirió color con la cumbia “Tres marías”, los aires funky de “Loco”, y el bolero “Los aviones” mientras nuestro hombre, que se mostró amable y agradecido pero no hizo gala de verborrea salvo en un par de momentos puntuales, tenía un recuerdo para bandas amigas y compatriotas que también estaban de gira por el país (entre ellas, El Mató A Un Policía Motorizado) y no perdía la oportunidad de soltar un comentario con sorna acerca del ambiente político español, refiriéndose a nuestro país como “los Estados Unidos de España”. Más interés generaba en él la prohibición de los toros, 'certificando' su regreso a Barcelona con una corrida a través de las pantallas durante la frenética “Días distintos” (más tarde, el asunto también le serviría para introducir un breve pasaje de “Volver” que hizo de enlace con una fantásticamente recibida “Flaca”).

    Con el personal entregado (el público le lanzó gorras, flores, pancartas, camisetas albicelestes, chapas, colgantes, y un misterioso paquete hecho bola, que fue casi lo único que conservó) y una dinámica de actuación sólida a falta de vértigo (que ya tenemos una edad…), la reciente y remarcable “Plástico fino” y la rockera “Me arde” (continuada con “Nadie es perfecto” de Patricio Rey y Sus Redonditos de Ricota, uno de los homenajes musicales de la noche junto a parte del "Somebody put something in my drink" de los Ramones con el que cerró la velada, y el mítico riff de "Smoke in the water" que coló en "Output…" tras su línea referencial "¿cuántos escucharon 'humo sobre el agua'?") dieron paso a un retahíla final de hits que parecía que iba a quemar todas las naves antes de llegar el bis (musculoso, con la citada “Alta suciedad” y una contundente pero emotiva “Los chicos”, que sirvió para recordar con imágenes a ídolos y amigos caídos como el 'Che' Guevara, Gardel, Camarón, Infante, Abuelo, Pappo, Morente, Spinetta, o Paco de Lucía, entre otros), puesto que se sucedieron “El salmón”, “Estadio Azteca” (de las más aclamadas de la noche), las citadas “Sin documentos” y “Flaca”, y una monumental “Paloma” que Calamaro selló repitiendo el verso “quiero vivir dos veces”. Mejor que no se preocupe por ello, porque, por ahora, tiene cuerda para rato.



  • @alias:12d8tqnr:

    i y menudo final con esa versión larguísima de Fine Flow.

    https://www.youtube.com/watch?v=Sym6mE0vIbg



  • Ayer conocí a Mr. T-Bone, que es un tipo italiano (de turín) con un look de los años 40/50 algo desarrapado que se dedica a ir por el mundo tocando el trombón, sus canciones y las de otros míticos artistas. Su banda habitual son los Young Lions, pero ayer estuvo acompañado en la Gruta 77 por los Upstemianss. El trombón del señor chuletón suena a gloria y cuando no lo toca canta sus letras sencillas y divertidas como The president of republic of Bananas http://www.youtube.com/watch?v=mCNBuiZQliM. Hubo tiempo para homenajear al rey del swing Louis Prima (http://www.youtube.com/watch?v=-HpR2P6Wg9U), a Laurel Aitken y al gran Don Drummond. Un concierto muy divertido para una noche fría de jueves en la que muchos prefirieron quedarse en casa con las pantuflas. Por cierto, detallazo vender LPs, 7" y CD a 5€ cada. Hoy y mañana anda por Cataluña y el domingo en Valencia.



  • Muy bien Él Mató A Un Policía Motorizado ayer en Madrid. Tanto que salí totalmente convencido de verles las tres veces que tocan la semana que viene en Barcelona.

    Se notó mucho el mes de gira que llevan por España y Francia. No es que en septiembre en Moby Dick llegasen poco rodados, pero es que esta vez sonaron arrolladores.



  • Copio lo puesto en Festivales 2014 porque ya que me curro la parrafada, que se lea, que se lea.

    El Field Day es una puta mierda de festival, así lo digo. Y es una puta mierda hidiente si lo comparas con lo que hemos gozado en el Primavera Sound este año. Y es que ya me avisó un amigo inglés: "Es el festival con un lineup cojonudo que luego suena a mierda". Pero no es sólo eso: el público es lo puto peor, público inglés muy joven que va por la fiesta unicamente. Añádase a esto una logística que se orienta a joder al cliente, con colas interminables en cualquier lado, prohibición de traer comida o salir del festival y unos registros exhaustivos coronados con perros olisqueandote, y es para decir que vale, que no vuelves.

    Aún así hubo cosas muy disfrutables, sobre todo a primera hora, cuando sólo había gente que estaba ahí por la música. Funkineven está haciendo un show muy a lo Galaxy 2 Galaxy que, aunque tiene que limar, promete mucho, con su saxo en directo y todo eso. Thurston Moore presentó su nuevo disco - creo que menciono que sólo estaban tocando las de ese disco que saldrá en octubre - y os juro que fue lo más parecido a un concierto de los Sonic Youth clásicos que podía imaginarme, con sus mismos pasajes melodía-ruido y una potencia absolutamente sobrecogedora: AL PS15 YA.

    James Holden presentaba un live con saxo y batería, y hasta cuando se le jodió el portátil estuvo muy bien la cosa. Y él es encantador, diantre. Todo tenía un tonillo medio kraut, con lo que nos gusta eso para bailar, así que habrá que echar un ojo a sus próximos proyectos. Simian Mobile Disco también presentaban nuevos temas, y aviso que aunque son de bpms más tranquilos que los anteriores de Delicacies o los de Unpatterns, acaban con un delirio acid al mismo nivel; no es que estén variando demasiado la fórmula, pero sí que la han perfeccionado.

    A partir de ahí, el desastre por las carpas. Jackmaster y Oneman estaban haciendo una selección estupenda en una carpa donde sólo, unicamente, se oía el sonido de la gente al hablar porque a los organizadores sólo se les ocurrió conectar los altavoces de atrás a última hora, en el concierto de SBTRKT.Oneohtrix Point Never aprovechaba unas visuales para dar rienda suelta a su ambient, un ambient que ultimamente me dice bien poco. George Fitzgerald muy bien, siguiendo exactamente los mismos pasos que el gran jefe Joy Orbison: ahora pincha un house muy fino y muy "analógico".

    Todd Terje fue UN PUTO INFIERNO. Con las ganas que había de pegarse la fiesta con la caterva de temazos que ha tenido estos años, y era imposible por el ruido, el agobio, los empujones, los gritos a tu oreja. He estado en conciertos del Sónar en el Macba con más comodidad que esto. Total, que nos fuimos a repetir con Courtney Barnett, que sonó mucho menos ruidosa y más agradable que en el PS14.

    Mirando el estado del festival, vimos que el único escenario abierto, el grande, tenía el nombre de … Jon Hopkins. Jon Hopkins, coronado como best new music de Pitchfork allá por abril del año pasado, y que en el Lovebox, contradiciendo mis temores, estuvimos viendo (bailando) no más de 50 personas en una carpa enana, y ahora estaba en el escenario más tocho de todos. ¿Qué ocurrió? Nada, el hombre puso lo suyo (con algún arranque dubstep que, desgraciadamente, no era el de Vessel) y la muchachada fue viniendo a ver qué era eso que sonaba. Cada uno que pasaba por mi lado me preguntaba quién era ese tío, porque no les importaba en realidad. Decenas de gente nos fueron empujando para estar en primeras filas. Y cuando eso llegaba a un clímax, empezaron a soltar desde primeras filas unos balores hinchados, recibidos por el público con vítores.

    Eso para que luego hablemos de que en España tomamos a la música como algo de fondo. Me parecía tal puta falta de respeto con la propuesta de Hopkins que me pillé un cabreo magnífico. Ahora, los niños muy entretenidos con el centenar de baloncitos.

    De lo que quedaba, me quedé al live de Tourist que aunque de live no tenía mucho, tiene unas cuantas canciones muy importantes, de un ritmo más sincopado de lo que esperaba uno, de decir "joder, un respeto". Y tras quedarme en Metronomy para los dos temas que no llegué en el PS ("Love Letters" y "The Look"), fui a dar la última oportunidad de mi vida a SBTRKT: ni lo intentéis de nuevo, que el tío hizo practicamente lo mismo que en el PS pero sin tanto parón. Y para hacer trap sin alma, por mí que se vaya a su casa, que lo molón suyo era mezclar estilos, no estancarse.

    Total, hoy vuelvo a una versión con mitad de escenarios. Que Dios me pille confesado.



  • Que grandes Chain & the gang en la Planta Baja de Granada anoche. Ian Svenonius domina la escena al estilo de Gil Scott-Heron, abanderado muy guapamente con un banda de pivas con cara de palo (la batera si sonreía, me sonaba la cara de Vivian Girls). Discurso políticos hedonistas y mucho baile soulero garajero. "Las naciones son una fantasía corporativa" contaba el bueno de Ian. Hoy los tenéis por Barna.