MÁS CULTURA
-
Solo quiero dar las gracias a Los hermanos de Boer. Siguiendo su consejo he ido esta tarde a ver a Faemino y Cansado.
He de reconocer que cuando empezaron con lo del dentista y lo de mejor allí que delinquiendo me temí lo pero. Pero no, fue todo nuevo. Salí llorando de la risa, literalmente. Risa garantizada. Desde luego vale los 25 euros que cuesta.
-
¿Alguien ha leído a Steinbeck? Me leí 'Tortilla Flat' el mes pasado y no sé, igual no he pillado de que iba la magia y el poderío del autor.
-
no sé, "Tortilla flat" no es de las mejores. si no recuerdo mal (la leí hace unos veinte años), es de las primeras que escribió y va sobre los mejicanos de su pueblo y tal, no? yo recomendaría "of mice and men", "las uvas de la ira" y, sobre todo, "la perla", una novela corta que escribió hacia el final y que se aparta un poco del rollo social espaldas mojadas que caracteriza a steinbeck
-
Ok, valoramos darle otra oportunidad en el futuro. Aunque el prólogo de la edición de Penguin se esmere en hacernos ver que el escritor no sé está riendo de los paisanos, que, al contrario, eran amigos no me convence. Me parece una burla clara, a no ser que el Steinbeck estuviera realmente zumbado y lo encontrase maravilloso.
-
Reseñas de videojuegos se permiten?
-
alguien ha leído algo del ensayista/intelectual/filósofo francés Marcel Onfray? yo estoy alucinado con este hombre desde que le descubrí en un documental reciente sobre pensamiento libertario.
he empezado sobre su "Tratado de ateología", publicado en compactos de Anagrama, pero es que tiene libros sobre una historia de la contrafilosofía (uno de los cuales se centra en uno de mis campos favoritos, los presocráticos), uno sobre Freud y el psicoanálisis, otro sobre el hedonismo..
"Tratado de ateología" super recomendable para quien le interese la religión desde un punto de vista antropológico.
-
Lecturas recientes que comento:
· La pastoral catalana, de Julià de Jòdar. Inspirada en el libro de Philip Roth, el autor hace un retrato de la sociedad catalana actual (cogiendo a los de la generación del 68 en la actualidad) y la compara con la norteamericana. La prosa es sencilla y sin pretensiones y el libro, sin fascinar, aporta un poco de luz a algunos temas claves de esa generación como la caída de los ideales, las ideologías y el pragmatismo, a veces cínico, y el individualismo de los que vivieron esos tiempos que se suponían de cambio.
· Un dia tranquil, de Ponç Puigdevall. Novela sobre el fracaso vital con una cantidad nada menospreciable de ironía y capacidad de reírse de uno mismo. La prosa pueda llegar a momentos de genialidad, pero también de tedio. Largos párrafos, frases interminables y las cosas raramente contadas tal com raja y de forma sencilla. A ratos quería terminarlo de una vez, a ratos no podía parar de subrallar pasajes y reflexiones memorables sobre la derrota y el fracaso, la vida una vez caído en el abismo.
· Big Sur de Jack Kerouac. Esta novela, con el rey de los beats cuarentón y famoso, deja claro en lo que no hay que convertirse después de la farra de los 20 y los 30. Sigue emocionando por la honestidad directa que le caracteriza, pero es básicamente un ejercicio de patetismo vital y de resaca juvenil mal llevada (él mismo lo acepta). Bolaño parece que llevó algo mejor el fin de su juventud.
El infantilismo de Kerouac me sigue pareciendo interesantísimo, viviendo con su madre a los cuarenta y teniendo todavía ese hogar, esa constante vital para no perder la cabeza definitivamente, con su madre en su casa esperándolo cada vez que lo necesitara.Ahora estoy leyendo Oblómov de Goncharov y después de 100 y pico páginas me está pareciendo un novelón del carajo, vamos a ver como sigue, aunque seguro que sigue bien.
-
Encantado de haberme atrevido con Chéjov, del que esperaba grandes dosis de costumbrismo y poco más.
Estaba muy equivocado. Su análisis del ser humano oculto tras el ser humano social, sus miserias, la brutalidad de la vida en el campo, la superficialidad de la vida aristocrática…
la temática es muy amplia y muy bien llevada en todos los casos.
Destacaría su relato Pabellón nº 6, apabullante.
-
Ya he contado en el Rincón de desahogo que últimamente no tengo tiempo de escribir aquí, pero sí de leer en diagonal. Y al ver Chéjov en negrita, no puedo evitar recomendaros una vez más esta adaptación de Louis Malle de su famoso Tío Vania:
Que la disfrutéis si aún no la habéis visto. Sobre todo si no conocéis la obra de teatro.
P.S. después de leer a Ashes: Hay muchos más nombres y apellidos que conjuran mi presencia, you know. Pero vamos a dejarlos en paz, de momento, o me colgarán de las patillas en la editorial de las portadas color vainilla. Toma pareado horrible.
Aunque lo realmente horrible es cuando no los puedes quitar de una traducción en prosa de ninguna forma plausible. (Para que rime con horrible…)
-
Está bien saber que si escribes Chejov en negrita aparece Thurman.
-
P.S. al P.S. anterior: Hablando en propiedad lo que he escrito no es un pareado. Para ello, los hipotéticos versos "o me van a colgar de las patillas / en la editorial de las portadas color vainilla" deberían tener el mismo número de sílabas.
Dios mío, me estoy volviendo loco. Au revoir les enfants.
-
Siempre puedes tomarte una licencia y decir "o me van a colgar de las patillas / en la editorial de color vainilla".
Bona revetlla!
-
En rigor, además, son las cubiertas o tapas, no las portadas.
Para bibliófilos de la vieja escuela pre-electrónica:
http://es.wikipedia.org/wiki/Partes_del_libro
Ah, y como no tengo tiempo para leer, pero sí para hablar por teléfono con personas que leen, ahí va una recomendación de mi hermana mayor (con la que suelo coincidir bastante):
Viaje al silencio es el resultado de diez años de búsqueda explorando el silencio con todas sus contradicciones y paradojas: como fuente de paz pero también de miedo, de creatividad y de parálisis, en diferentes contextos geográficos, tales como páramos islas escocesas, monasterios budistas, cristianos y reuniones cuáqueras, viajes al monte Sinaí y paseos por el montañoso sur de Escocia; también en textos literarios de místicos, exploradores, aventureros y condenados al ostracismo. Sara Maitland escribe su tesis principal en la que el silencio no debe concebirse como “ausencia” o vacío, sino como presencia.
PS: Mucho más bonito el título original, por cierto: A Book of Silence.
-
Yo ahora mismo estoy con Rayuela. Estoy empezando así que de momento estoy muy perdida…(lo estoy leyendo de forma salteada)
-
Aprovechando mi visita a Barcelona por aquello de ver a Juanita Newsom quería abastecerme bien de libros, alguna recomendación de librerías escapándose de Efnacs, Centrales y Casas del Libro?
-
Mmmm, Taifa en la calle Verdi, por ejemplo (Gràcia).
-
Documenta, en la calle Cardenal Casañas, al lado de la rambla
http://www.documenta-bcn.com/
-
Muy disfrutable la exposición en La Pedrera sobre la obra de Francesc Català-Roca. Para los que no lo conocen, es una buena oportunidad para conocer a un excelente plasmador de imágenes y instantes. Hay instantáneas que valen un potosí (como la de arriba). Quizás (y eso lo digo a nivel personal) la última aparte de la exposición no resulta tan interesante, pero eso es porque es tan antagónica con lo visto antes que hasta puede resulta chocante. Pero no quita el inmenso gusto que da ver esos intensos momentos en blanco y negro, dietarios de una España de hace ya 60 años.
Y francamente decepcionante la dedicada a José Val Del Omar en La Virreina. Por rácana y montada sin ganas, con una información parca y, sobre todo en lo referente a las Misiones Pedagógicas, amontonada. Y lo de la recreación del Laboratorio PLAT parece de la señorita Pepis. Si no se podía reproducir totalmente la espléndida exposición que se realizó en el Reina Sofía (una maravilla), se podría haber centrado en una parte de su trabajo, por ejemplo y, de esa forma, hacerla con un poco más de rigor, Lo único destacable es poder ver "Acariño Galaico", "Fuego En Castilla" y "Aguaespejo Granadino" (que, si mi memoria no me falla, no se veía en pantalla grande en Madrid) con copias restauradas y con un sonido fetén.
-
Lecturas más o menos recientes:
· Oblomóv de Ivan Goncharov. Novela tocho que cumple con todos los requisitos estilísticos y de formato de lo que se categoriza como gran novela rusa del siglo XIX. Oblomóv es un vago y apático terrateniente que vive en la gran ciudad en un estado lamentable, en batín todo el día, con un criado todavía peor que él, sin salir de casa ni interesarse por nada. Su amigo Shtolz, medio alemán y una jovenzuela le intentan sacar de su agonía vital y apatía crónica y de eso va la novela. Como en Dostoyevski, se plasma aquí el shock entre la sociedad europea occidental y la rusa de la época, en una novela donde no se deja ningún cabo suelto y en donde se describe todo.
Hacia la mitad de la obra temí un desenlace ñoño y predecible, pero la suerte de final donde las personas y las ideas (principalmente Oblomóv y Rusia) ganan y pierden a la vez de alguna manera me ha dejado bastante satisfecho.· Mil violines de Kiko Amat. Todos los haters absténganse. Se trata de un análisis vivencial de una serie de canciones que sirvieron de banda sonora de algunos capítulos de su vida personal. A mi me interesa y me pone la crítica musical vivencial, la cual puedo retener en mi memoria durante mucho más tiempo que una fría review 'objetiva'. También me interesan las personas y sus egos y sus opiniones y sus detalles vitales insignificantes para la historia de la humanidad. Es entretenido, especialmente el capítulo donde narra su primera experiencia en Londres, e igual sacan un par de referencias que desconocían.
· Estrella distante de Roberto Bolaño. Se trata de un spin-off de una de las historias más originales de La literatura nazi en América, la de un poeta fascistoide que escribe poesías en el cielo chileno con el humo de una avioneta. Como en Amuleto, spin-off de Los detectives salvajes, nos la da un poco con queso alargando un poquito una historia ya escrita (y muchas veces transcrita literalmente en algunas partes del relato). Ahora bien, yo soy bolañista y disfruto con las caras b,
In a strange room de Damon Galgut. Finalista del Booker de no sé que año, estamos delante de tres relatos independientes aunque con un protagonista común, un sudafricano que se dedica a viajar para deshacerse de sus miserias internas y ese no-se-sabe-que que le ataca desde dentro. El relato combina primera y tercera persona simultáneamente y tiene momentos de gran awkwardness como la tensión sexual del protagonista con otro hombre y la submisión total del anterior con éste en lo que respecta a las decisiones que se toman en como proseguir un viaje y que, en ese contexto temporal concreto, el viaje se torna tu vida. Quizás el último relato, donde el prota va a la India acompañado de una amiga autodestructiva, es más previsible, pero los dos anteriores son, indudablemente, dos perlas.
-
Ah, y por cierto: gracias por la recomendación de la exposición de Català-Roca. La disfrutamos bastante el viernes.