Crónicas conciertos 2010
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@los:
ROXY MUSIC: …pero el cierre con Editions of you y Do the strand fue glorioso.
que envidia
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@lilian:1tnj9yzy:
Yo me reafirmo en lo mio por mucho que me digais.
El compy del orbison entraba a destiempo, me parece muy bien si se puso fino de sangria en la barceloneta. Un poquito de por favor, a mi no me convencio.
el que acompaño a skream en el apolo hace un mes, se conoce que lo hizo mejor, por no hablar del gravamen que calza el niño.
+1, brothah
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unas cuantas impresiones sobre el Suénar (tochazo va):
sorprendente que King Midas Sound sonaran más ruidosos que Necro DeathMort, y, proporcionalmente, Fuck Buttons. Tres grandes conciertos, sonando con cuerpo y decisión, los primeros como una tormenta de niebla sonora cuando Kevin Martin le metía al aparatejo, los segundos con su ramalazo gótico -esas proyecciones católico-tenebrosas ayudaban- y sus momentos a ritmo de techno, y los terceros provocando importantes deserciones del personal en el SonarLab (y es que compartían noche con Chemical Brothers, Pinker Tones, Matthew Herbert, y Roxy Music).
Estos tres y unos muchos más volvieron a dejarle a uno la sensación de que paga más por menos de lo que pagando menos le da más el Primavera, pero a cambio de ver una media alta de conciertos notables-excelentes. Sobretodo, en el Sonar de Dia. Y si hay que empezar a soltar nombre propios y mayúsculos, hay que empezar con Broadcast, que hechizaron primero creando un ambiente sonoro misterioso, de turbio reposo, y luego ya con el sintetizador recuperando protagonismo. Auditori, por favor. De Elektro Guzzi solo vi tres temas, pero suficiente para comprobar que hacer techno con instrumentos era tan sencillo como combinar bombo de batería y bajo machacón hasta el infinito. Lo del ritmazo de los temas ya corrió a cargo suyo. Aufgang empezaron pelín demasiado académicos, pero pronto se dejaron ir, y dieron toda otra demostración de ritmo a dos pianos y batería, lo mismo que un Jimi Tenor acompañado de los africanos Kabu Kabu impregnando al afrobeat de aromas jazzeros, y que a medida que entraba en calor (paradójicamente, en medio de un pequeño chubasco que ahuyentó a parte del público) nos hacía bailar más y mejor.
Notables también los directos de Pursuit Grooves, que lo gozaba sola troceando sus temas de sonido negroide (y con Hudson Mohawke en un lateral del público comentando temas contractuales con ves-a-saber-quién), de Space Dimension Controller, ni por asomo lo "space" y germánico que suena en su último disco (tenía razón Guilen), pero haciendo las cosas bien igualmente, de LCD Soundystem, que no epataron del todo porque los temas nuevos son menos infalibles que los de antaño, pero con la maquinaria igual de engrasada que siempre y brillando con intensidad propia en rescates-rodillo como "Us vs.Them", "Daft Punk…" (aún más marciano el sonido de bajo que en el disco), "Tribulations" o "Yeah", de Booka Shade postulándose como una suerte de "Saffri Uno" de amor por el electro, repartiendo buenas dosis bailongas a última hora del viernes, y las sesiones de Moodyman, toda una fiesta popular en mitad de la tarde con presencia de temas como "Radio Clash", "Seven Nation Army", y más que no recuerdo, , y la punzante selección de techno de una animada y saltarina Mary Anne Hobs, ideal para la medianoche del mismo dia.
Buen nivel mantuvieron, para mi sorpresa, Roxy Music, aunque fue, de lejos, el concierto más fuera de lugar de todo el festival. Entre las aguas de la elegancia y el horterismo, con un saxo soberbio, buen sonido, y versión de "Jealous Guy" de Lennon por el medio. También Delorean me daban miedo después del chasco del ensimismado "Subiza", pero siguen ofreciendo un directo robusto en sonido y más que disfrutable. Lucrecia Dalt parecía la "cuota Natalia Lafourcade" de esta edición, ya que tocó en el mismo escenario -SonarDome-, casi a la misma hora -tres y cuarto-, y también sola con guitarra y máquinas como su compatriota, con la diferencia que ella hace los bucles y los efectos con el Iphone conectado a la guitarra y canta en inglés. Bonitos temas, pero sonido justito -no por nada estuvo medio discutiendo con un técnico de sonido tras su concierto-. Una tónica que se repitió la primera tarde con unos Caribou fatalmente ubicados, tanto por la atracción de público -carpa y alrededores hasta los topes- como por un sonido que hizo pelota con los graves, y que solo mejoró en sus -eso sí- espléndidos últimos cuatro temas. Suerte que el batería se ganó nuestra atención desde el minuto cero. Sin embargo, una de las bajas a última hora de la edición del año pasado, Goldielocks (que aguantó profesionalmente ver al público abandonarla poco a poco pero constantemente, hasta quedar media carpa de gente dispersa), sonó bien en el mismo escenario, mejorando lo escuchado en su myspace al quedar las bases hip hoperas y garage por encima de las voces -ella, y dos coristas- en plan r 'n' b.
Chemical Brothers fueron todo un espectáculo, pero pasada la impresión inicial se hicieron cansinos, previsibles, y hasta sospechosos como "directo". El ritmo que le dieron al concierto en su segunda mitad, mucho mejor (y eso que los temas del nuevo disco también me gustan). Y extremadamente románticos (nuevos visuales basados en una sombra -femenina- perdida que se encuentra a si misma fusionándose con otra -masculina-; el "I need you to believe in something / I need you to believe something" de "Believe" repetido de forma constante; un "Love is All" gigante final en las pantallas). Radicalmente diferente pero también con sensación de que le faltaba chicha al asunto fue lo de Faraón (que, sorprendentemente, empezó explicando que lo suyo era una propuesta "que se fija en el krautrock, Glenn Branca, y el post-rock"). Eso sí, no engañó a nadie (bueno, sobre Glenn Branca soy ignorante).
Sugarhill Gang fueron de vergüenza ajena, en plan orquesta de fiesta mayor, con innecesarias versiones de Beyoncé y Michael Jackson, e invirtiendo un tercio del concierto en parlotear tonterías. Y eso que empezaron bien. Pero, al final, "Apache" (con el sampler de los Shadows totalmente ahogado) y "Rappers delight" apenas levantaron los ánimos tras lo visto. Respecto a Joy Orbison, sufro un vacío mental que me impide recordar a qué sonaba, pero sí que no tenía nada que ver con el sonido lo-fi de sus temas en myspace/youtube (o quizá lo confundo con otro).
Sandwell District y su minimalista y adictiva sesión de techno pusieron el broche final a la primera edición entera del Sónar a la que servidor asistía, y que disfruté de lo lindo.
Off-Sónar, mencionar la anécdota de show de 20 minutos en La [2] que ofrecieron las Chicks On Speed (mejor dicho, "la", que solo había una de ellas, acompañada de otras tres señoritas -la teclista de La Otra Gloria, entre ellas-), y que consistió en "We don't play guitars", seguido de unos cuantos estribillos de canciones bailongas de los ochenta y los noventa, y el pedazo doble concierto de rock cavernoso en Clandestino a cargo de Decurs, en cuya fluidez se notó que en mayo habían tocado a diestro y siniestro por la península, y los veteranos Sabot, que ofrecieron una intensa, potente y virtuosa demostración de rock instrumental con bajo y una batería.
ale, que pase Dylan
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Hace mes y medio en Girona se celebró el primer Pol·lenDate, hice una videocrònica donde aparecen tocando gente como Colomo, Desmond, Your Kid Sister o Mein Sohn William.
No me ha quedado mal aun sin poder dedicarle toda la atención que se merece. Vamos, me gusta pero con una tarde más lo hubiera dejado estupendo:Ah! Todo esto dentro del marco de Temps de Flors, Girona en plan bonica y tal.
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Coco (y por extension todos los que asistan), te lo vas a pasar pipa con KISS.
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Anoche fui a ver a uno de mis 'guilty pleasures', Danzig, en realidad a estas alturas ya no tanto, pero en su dia fui bastante fan de Misfits, asi que esto era de visita obligada.Estuvo bastante bien de voz, considerando su edad, aunque las notas mas altas las cambia porque ya no llega. Por suerte, tocaron bastantes temas de sus cuatro primeros discos, nada de Misfits, y una version de Elvis. De teloneros, varias caras conocidad para los fans de Mistits, Gorgeous Frankestein y tambien Seventh Void, que incluye miembros de Type O Negative.
Me llamo la atencion que se llenara la sala, 2500 personas, teniendo en cuenta que Dwarves tocaban en otra sala y tambien Isis/Melvins en otra, me alegro por el.We are 138!
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@jackster:3hvav3l4:
Coco (y por extension todos los que asistan), te lo vas a pasar pipa con KISS.
calla calla que ganazas!
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@djcoco:1jr5y1u1:
@jackster:1jr5y1u1:
Coco (y por extension todos los que asistan), te lo vas a pasar pipa con KISS.
calla calla que ganazas!
Yo tambien me lo he pasado teta. Gran ambiente, con mucha peña con las caras pintadas y espiritu de Kiss mania por todos los lados. El espectaculo que llevan es un derroche de medios a la altura de la leyenda de la banda. Yo los vi dos veces en el 96 y 97 cuando se juntaron los cuatro originales. Y el set list de entonces se basa unicamente en la primera epoca. Ahora tiran de clasicos de todas las epocas, y molo mucho oir el lickt up. El sustituto de ace frehley lo hace muy bien, vamos que le imita hasta las posturitas. Pero nunca estara a la altura del gran extraterrestre. Para Gene Simons y Paul Stanley no pasan los años. Bueno quizas no mueva tanto el culo el bueno de Paul. Muchos niños y adultos que sencilamente se dejaron llevar por las 2 horas y 15 minutos del mejor Circo del Rock & Roll.
Un solo pero, el sonido podria haber sido mucho mejor.
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@jackster:tnt84amo:
Coco (y por extension todos los que asistan), te lo vas a pasar pipa con KISS.
Mierda, me sobra una entrada (la de mi novia) para ver a Bob Dylan, pero creo que estoy por venderme la mía también e irme a ver a los KISS. Cosas de la vida, nunca he podido ver al abuelo en directo, pero ya he leído que suele ser infumable como en su anterior visita al Poble Espanyol. Rectificar es de sabios, dicen.
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Calle, calle, estamos pensando exactamente lo mismo.
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Hay que saber a lo que se va con Dylan, no será un concierto como el de Cohen o de Fogerty, que sabes que te tocará los éxitos tal cual, sin más, apto para fans y para recién iniciados.
Yo si voy a un concierto de Dylan y me toca un repertorio de grandes éxitos tal cual me sentiría estafado. El personaje exije que te salga con algo que no esperas, que juegue a la contra, que no sea próximo y complaciente.
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ya, por eso me voy a Kiss
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@Pekh:1gh24kew:
Hay que saber a lo que se va con Dylan, no será un concierto como el de Cohen o de Fogerty, que sabes que te tocará los éxitos tal cual, sin más, apto para fans y para recién iniciados.
Yo si voy a un concierto de Dylan y me toca un repertorio de grandes éxitos tal cual me sentiría estafado. El personaje exije que te salga con algo que no esperas, que juegue a la contra, que no sea próximo y complaciente.
Y sobretodo que se aguante sobre el escenario.
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Que está mayor ya lo sabías cuando compraste las entradas, o era para revenderlas cuando se agotasen?
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Ah, pero se han agotado?
Iría encantado a ver a Dylan cualquier otro día ya que nunca le he visto, pero creo que cuando las compré no sabía que coincidía con KISS.
Pues nada, si alguien quiere 2 entradas a precio de coste, privado al canto.
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a ver, no jodamos: dylan es un ente creativo con vida propia y con una salud de hierro (hablo a nivel de creatividad). todos estos que comentais (cohen, fogerty, kiss) son jukeboxes que te hacen un chou musical de parque temático. que me parece de puta madre si lo que vas a ver es eso, ojo.
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Yo voy a verlo al Azkena, a él y al Isaak, pagar sólo por ver a Dylan me parecía mucho riesgo. Así por lo menos me quito la espina que tengo clavada de no haber visto nunca a ninguno de los dos, y si Dylan hace una mierda siempre me queda el valor seguro de Chris.
Kiss nunca fueron lo mio.
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@manel:ncerafje:
a ver, no jodamos: dylan es un ente creativo con vida propia y con una salud de hierro (hablo a nivel de creatividad). todos estos que comentais (cohen, fogerty, kiss) son jukeboxes que te hacen un chou musical de parque temático. que me parece de puta madre si lo que vas a ver es eso, ojo.
esto era exactamente lo que quería decir. Que hay una serie de conciertos que vas en plan nostálgico, pero que sabes que no es nada "creativo", solo un remember de greatest hits con más o menos acierto (lo de Fogerty o Cohen es un remember cojonudo, hay otros que no tanto). en cambio Dylan es otra cosa
Pero vamos, que convencer a alguien a estas alturas es absurdo, seguro que las críticas de la prensa al día siguiente serán nefastas.
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A ver, nosotros no nos engañamos. Vamos a ver a Dylan porque tenemos curiosidad -y nos lo podemos permitir- pero vamos con la expectativa baja a ver si, por poco que nos dé, salimos satisfechos.
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**JEAN-LUC GUIONNET & SEIJIRO MURAYAMA
22-06-2010
Domicio Particular (Barcelona)**
A simple vista, uno puede llegar a la conclusión, de forma muy pronta, que lo de ayer fue uno más de esos conciertos herméticos y crípticos donde uno, si no está muy adentrado en estas historias pero muestra interés en ellas, trata de encontrar alguna grieta por donde colarse y meterse de lleno en un mundo completamente distinto a cualquiera. Si, por el contrario uno ya está curtido en estas batallas, va de cara a barraca y le da a la propuesta unos 10 minutos, el resultado final (y volvemos con las prisas) es que no solo lo ha visto unas cuantas veces sino que no aporta nada, que está más visto que el tebeo y todo eso. Hasta incluso cabe la posibilidad que, después de acabar el bolo y creer que lo visto no pasa de aprobado raspado, al cabo de un rato empieza a darle vueltas a la cosa y comienza a descubrir un cierto meollo en el invento. A nivel personal creo que está es mi posición frente al tour de forcé que protagonizaron el saxofonista francés y el percusionista nipón, una pareja que se conoce a la perfección y que saben apretar los resortes sonoros de su compañero.
Fue un concierto de silencios, matices, tensión y altas dosis de concentración. Concentración que no se rompió ni ante algún sonido que no fuera creado por los dos. Esta alta capacidad de concentración era palpable en el nipón: se paso todo el bolo (unos 40 minutos) con los ojos cerrados y solo los abrió para cambiarse los objetos de manos o bien para coger de nuevos, volviendo rápidamente al nivel de concentración anteriormente conseguido de forma veloz. Murayama es un percusionista al cual no le hace falta mucho para conseguir lo que se propone, aunque también se atreve con un mayor número de elementos. Ayer, con tan solo una sencilla caja, una escobilla, un par de baquetas y otro par de mazos, tuvo suficiente para aportar una gama de sonidos salidos de todos los elementos presentes en la caja e, incluso, de los mismos objetos percutivos. Guionnet lo tuvo complicado, mucho más. El saxo, como muchos instrumentos, es altamente complejo a la hora de sacarle sonoridades distintas a las que se extraen mediante las formas y maneras tradicionales. Y sabedor de ello, se encargó de tensar el ambiente con susurros, silencios, algún largos fraseo y, sobre todo, algunas notas mantenidas en volumen más alto (hay que tener en cuenta que la amplificación era mínima) que, carajo, eran unos trallazos a un oído que estaba felizmente aposentado en el silencio.
Todo esto suena atrayente e, incluso, hasta reconfortante, pero este tipo de propuestas minimalistas siempre corren el peligro de tener un recorrido corto y de ser pasto de la, en muchos casos, inútil dilatación temporal. Ayer creo que esto sucedió pero, al contario de otras propuestas donde este agotamiento de ideas es claro, diáfano y aplastante, ayer al menos no fue tan evidente debido a la calidad de los intérpretes, pero, eso sí, esto hay que tomarlo en dosis muy calculadas.
Y la semana que viene, un valor seguro: Rinus Van Alebeek y sus cassettes. Ya voy buscando el babero.
