MÁS CULTURA



  • esta mañana he ido a ver la exposición THAT'S NOT ENTERTAINMENT que celebra los 5 años de Xcentric en el CCCB. Muuuuuuuuuuuy recomendable. No es muy amplia, pero si que hace entrar al neófito en el campo del cine experimental o fuera de las normas comúnes del medio. Y si tienen ustedes valor, pasense unos minutos en esa pequeña cámara de los horrores que es ese espacio dedicado al cine más gore, con autopsias, ejecuciones y demas lindezas reales.

    Y ya que estaba allí, también he visto HAMMERSHOI Y DREYER, muestra en que se trata de demostrar las similitudes entre los dos artistas daneses a pesar de trabajar en dos campos distintos. La verdad es que los cuadros de Hammershø son realmente hermosos, con un dominio de la luz impresionante. Y, sobre todo, destacar el hecho de ver algunos cuadros en pequeñas estancias aisladas, con una luz especial, para poder verlas en todo su maravilloso esplendor y sin distracción posible. Una exposición que hace que el personal la contemple en un silencio respetuoso. Maravillosa.

    este cuadro, por ejemplo, ciera la exposición y es una verdadera maravilla de como representar la luz diurna con todo lujo de detalles, ademas de tener, por si mismo, una gran carga poética.

    Vayan a verlas, se las recomiendo.



  • @30segundossobreTokyo:11t2k3wy:

    esta mañana he ido a ver la exposición THAT'S NOT ENTERTAINMENT que celebra los 5 años de Xcentric en el CCCB. Muuuuuuuuuuuy recomendable. No es muy amplia, pero si que hace entrar al neófito en el campo del cine experimental o fuera de las normas comúnes del medio. Y si tienen ustedes valor, pasense unos minutos en esa pequeña cámara de los horrores que es ese espacio dedicado al cine más gore, con autopsias, ejecuciones y demas lindezas reales.

    Buff, no sé qué decirte. Yo fui hace un par de semanas y me parecía muy flojito. El cine experimental suele dar bastante más que lo que ofrece la exposición y al final acaba siendo fuegos de artificio, un pastiche CCCb de ideas inconexas. Quizá lo que más me interesó es el tema del cine en su punto más básico, el de los impulsos lumínicos. Lo de las diapositivas pintadas me pareció un peli sobado. Y el tema del cine como una industria alienante incluso me puso de mala leche por su poco espíritu constructivo y su panfletarismo manido.

    Y lo de la cámara de los horrores… me pareció muy superficial. Un tio con máscara y pistola masturbándose y ver un ojete cagando desde una pantalla cenital me pareció muy gratuito y poco edificante dentro de una explicación sobre qué es la provocación. La cultura occidental ya ha metabolizado todo eso, ya no nos sorprende ni inquieta. Me sabe mal decirlo pero creo que es la cuota frívola que se marca el CCCB en cada una de sus expos para seguir manteniendo cierto caché underground. Quizá debería comenzar a plantearse en una exposición qué es ser un outsider y qué no lo es por mucha tripa, sangre y semen que metas.

    Del CCCB las expos que me gustan son las que, paradójicamente, tienen un formato más clásico o las que directamente son un divertido engendro, como la de la Cultura Basura.



  • Tienes razón, 30segs., Hammershoi es mucho para los ojos… Y eso que siempre he visto sus cuadros en fotos. Suerte la tuya que has podido contemplarlos al natural, y encima en una exposición tan cuidada, por lo que dices.
    Si te interesa la pintura en general, ésta es una de las mejores páginas que conozco.

    http://pintura.aut.org/

    Hay obra de todo bicho viviente y no viviente; muy bien ordenada además y con buenas reproducciones.



  • y encima…hoy era gratis. No se porque, ni lo sabia, pero cuando he llegado allí, dispuesto a soltar la mosca, me han dicho que hoy era gratuito. Juas.

    Dear Day: yo no se si realmente el propósito de la exposición es hablar sobre el cine experimental o sobre los 5 años de actividad del Xcentric. Si es lo primero (cosa que realmente dudo), no puedo por más que darte la razón. pero reo que la cosa va más por lo segundo. Yo, por lopronto, me he puesto abajar algunas cosillas en la mula que están en la exposición y tengo planeado (si no sucede nada raro), ir el sábado a la "gala" con estas proyecciones:

    The Mozart Minute de varios autores
    Kristall de Matthias Müller y Christophe Girardet
    Deanimated: The Invisible Ghost de Martin Arnold

    Digamos que me a picado el gusanillo...total, si oigo música rara, ¿porque no ver cine igual de marciano?. Ya que propongo el exterminio de las canciones en la música, será cosa de proponer lo mismo con las historias convencionales en el cine.

    Yo, por lo pronto, sigo con el recuerdo de los cuadros de Hammershøi y de los fragmentos de las películas de Dreyer. Y es que eso de irse a dormir pronto los sábados tiene sus compensaciones.



  • @30segundossobreTokyo:1bxj8a6y:

    Dear Day: yo no se si realmente el propósito de la exposición es hablar sobre el cine experimental o sobre los 5 años de actividad del Xcentric. Si es lo primero (cosa que realmente dudo), no puedo por más que darte la razón. pero reo que la cosa va más por lo segundo. Yo, por lopronto, me he puesto abajar algunas cosillas en la mula que están en la exposición y tengo planeado (si no sucede nada raro), ir el sábado a la "gala" con estas proyecciones:

    The Mozart Minute de varios autores
    Kristall de Matthias Müller y Christophe Girardet
    Deanimated: The Invisible Ghost de Martin Arnold

    Digamos que me a picado el gusanillo…total, si oigo música rara, ¿porque no ver cine igual de marciano?. Ya que propongo el exterminio de las canciones en la música, será cosa de proponer lo mismo con las historias convencionales en el cine.

    30, el problema es un problema de comunicación. El cccb debería dejar más claro que esa exposición es, en efecto, sobre el XCéntric (que lo hace, pero una vez entras el ritmo de la exposición te quiere llevar por otros derroteros), pero la presentación del tema es rimbombante y pretenciosa y después encuentras otra cosa más humilde.

    Y sí, lo de aplicar la idea que se tiene de un arte en todos los demás es una cuestión de lógica. Ya irás explicando tu investigación en este campo en este maravilloso post que es MÁS CULTURA. Acabaremos hablando todos de gente todoterreno como Bill Viola.



  • si, inténtare ir desgranando lo que vaya viendo, teniendo en cuenta que ahora estoy muy absorvido en el mundo del cine z (el cual, por cierto, tiene muchas familiaridades con el cine experimental). Por lo pronto, ya he bajado cosas de Kenneth Anger y el famoso documental sobre Charles Manson. Y hoy he visto la primera parte de De Nens, el documental que Jordá realizó sobre el caso de pederastia del barrio del Raval.



  • Plataforma. Maravillosa. Y dura. Temía que Bieito empezara a quemar su fórmula, pero no ha sido el caso. Temía sentirme demasiado alejada de una nueva visión desencantada y profundamente masculina de la degeneración occidental, pero tampoco ha sido el caso. Parece que Houllebecq y Shakespeare no sean tan distantes. Mención especial para el gran Echanove; bendita la hora en que él y Bieito se conocieron. Ale.



  • Siempre me he fiado mucho de las críticas de Marcos Ordóñez en Babelia, Ashes, y parece que (según tu criterio) hago bien.

    TEATRO
    Encerrados con un solo juguete

    Marcos Ordóñez

    BABELIA (El País) 30-09-2006

    Michel, el protagonista de Plataforma, es un funcionario del Ministerio de Cultura francés. Cuando sale del trabajo reparte su ocio entre los peep shows de París y los 28 canales de su televisor. “Mi entusiasmo por los coños”, dice a poco de empezar su soliloquio, “es una de las pocas características humanas que me quedan”. Michel, bien se ve, está harto de todo. De su trabajo, de los otros y de sí mismo. Una herencia inesperada le permite escapar a Tailandia para resolver uno de sus grandes problemas: “Ligarse a una desconocida y follar con ella se ha convertido en una fuente de humillaciones. Es más fácil ir de putas. Pero las putas de Occidente son desechos humanos”. Es una frase muy característica de Houellebecq: la irónica justeza del diagnóstico -el imperativo de goce como fuente de todo mal- trae de la mano una tremebunda igualación a la baja.

    En Tailandia, Michel conocerá a un puñado de alegres desesperados. Como Robert, catedrático de matemáticas, jubilado a los 49 años, que dedica su vida al turismo sexual (tirarse niñas, concretamente) y sustenta, entre otras ideas peculiares, que la base del racismo es “la competencia por la vagina de las mujeres jóvenes”. O Daniel, un amargo humorista televisivo en vía hacia el suicidio, que se lamenta de que “la sociedad actual ha roto tantos tabúes que ya no queda nada por transgredir”. Cuesta discernir si todo lo que Houellebecq pone en boca de sus personajes es reflexión personal o sátira negra, y tal vez esa ambigüedad sea su comodín, aunque uno tiende a desconfiar de un autor que se pasa la náusea por el forro cuando argumentalmente le conviene. Porque entre mamada triste y enésima imprecación, Michel se enamora como un becerro de Valérie, una alta ejecutiva. Y viceversa, sorprendentemente. Valérie es un chollo, “una mujer que siente placer y desea ofrecerlo”. Come de todo y le ofrece, entre otros regalos, un mènage à quatre con una pareja negra. Que la buena de Valérie pueda enamorarse de un pelmazo del calibre de Michel puede entenderse como una fantasía de Houellebecq o un perverso giro sarcástico, pero ni los mejores polvos sacarán a nuestro héroe del lodo jeremiaco: “Los occidentales tienen todo lo que quieren y no consiguen encontrar la satisfacción sexual. En Oriente hay millones de personas que sólo pueden vender su cuerpos, su sexualidad intacta”.

    Así las cosas, Michel propone a Valérie y a su socio Jean-Yves, ambos en el negocio hotelero, la creación de un paraíso para europeos alicaídos en Pattaya Beach, que “es al sexo lo que Lourdes al agua bendita”. De nuevo, el escalpelo social hace sospechar un truco de guión para un apocalipsis moralista. Se diría que Houellebecq necesita que vuelvan a Tailandia para que haya castigo, anunciado en un monólogo del viejo Robert ciscándose en el islam, “el monoteísmo más extremo y radical que se conoce”. En plena fiesta de inauguración del superburdel, los integristas pegan un bombazo. Palman todos menos Michel: ha de quedar vivo para sentenciar que “hemos creado un sistema en el que ya es imposible vivir”. Que Plataforma me parezca una relectura posmoderna de Gran Hotel y Amor y muerte en Bali de Vicky Baum es del todo secundario ante la puesta en escena de Calixto Bieito, que con ayuda de Marc Rosich ha levantado un espléndido espectáculo, una inteligente y perturbadora fantasmagoría. Desde su Nada terminal, colgado de Trankimazín y Jack Daniel’s tras el atentado, Michel recibe la visita de sus muertos, condenados, como él, a repetir gestos, palabras y movimientos sin éxito en un infierno de dos dimensiones (una hilera de cabinas de sex shop y el bar de un hotel con un lujurioso piano forrado de leopardo) que, metáfora perfecta, gira incansablemente: doble aplauso para el escenógrafo Alfons Flores y para Xavier Clot, artífice de esa luz helada y sulfúrica. Una hilera de televisores vomita trallazos de porno duro, pero los celadores de la moral pueden dormir tranquilos: a los diez minutos la reiteración hace que los veamos como samplers de quirófano. Aquí el sexo es literalmente oral, y las descripciones más gráficas resuenan con la lúgubre cadencia de un oratorio.

    Bieito y Rosich han introducido la novela de Houellebecq en una centrifugadora onírica que tritura y expulsa la hojarasca, convirtiendo el texto en una lanzadera escueta y urgente de monólogos entretejidos: pura materia dramática. El juego escénico establece una tensión constante entre la energía nerviosa de los actores, siempre propulsada hacia delante, y la atmósfera decadente que tiende a congelarlos. Habitado por un extraordinario Juan Echanove, que sostiene la función sobre sus hombros como quien acarrea un fardo viscoso, Michel tiene ahora un cuerpo doliente y sonámbulo, con una vulnerabilidad que no le imaginábamos sobre el papel, atravesada por una alegría infantil y subterránea que le hace dislocar una perorata en caída libre con la inesperada fuga de Surfin’ USA, del mismo modo que “sabemos” mucho más de Valérie gracias a la sensualidad elegante y fatigada de Marta Domingo, pedazo de actriz: su forma de cantar J’écoute de la musique saoûle, de Françoise Hardy, vale por seis páginas de novela.

    Hacía falta esa carne actoral para que viéramos Plataforma: el curvo garabato de jabalí lúbrico con que Carles Canut dibuja a Robert, la fría agitación neurótica que sacude al Jean-Yves de Lluís Villanueva, el desamparo tuerto del Lionel encarnado por Mingo Ràfols, o el claqué invisible y taladrante con que Boris Ruiz calca a Daniel sobre la silueta de Krusty el Payaso, todos ellos sobrevolados por ese ángel desnudo (revelación: la cantante y bailarina Belén Fabra) que gira en la barra dorada y narra su violación en un metro parisiense desde el rincón más aterido del infierno. En manos de Bieito y la formidable compañía del Romea, la novela de Houellebecq se convierte en un rotundo artefacto teatral que, tras los aldabonazos de El Rey Lear y Peer Gynt, marca su entrada en una etapa de madurez expresiva.



  • No sé si a alguien por aquí le interesará el surrealismo.

    http://www.appia-d.ch/

    De todos modos, ésa es la página de Dominique Appia, un pintor suizo bastante interesante (a veces excesivamente "decorativo") poco conocido en España, aunque un cuadro suyo tuvo mucha difusión en póster.

    Éste:

    "Entre les trous de la mémoire"

    (Siento no encontrar una reproducción de mejor tamaño y más fiel a los colores originales, donde no se le hayan recortado demasiado los lados. Por lo menos en ésta casi se ve el cuadro entero.)



  • Ashes: totalmente de acuerdo. Echanove/Bieito for ever.
    Despés de mucho tiempo sin ir al teatro por culpa de mi escasez de planificación, esta vez pude ir el viernes a ver Plataforma: poema dramático hiperrealista para siete voces y un yamaha.. Olvidénse del libro, es la visión de Bieito de la historia, y no tiene que coincidir con la de cada uno. Disfruten de ésta, realmente cruel, descarnada y muy sincera. Sitaciones y diálogos reales, movimientos reales, como extraídos de la vida. Mi poco bagaje en la experiencia teatral me impide escribir una crónica/crítica más elaborada. No se la pierdan. El teatro estaba lleno.



  • No sabia muy bien donde meter esto...

    _Plácido Domingo y David Cronenberg preparan una versión operística de 'La Mosca'
    El estreno mundial de la obra está previsto para el 1 de julio de 2008, en el Teatro del Châtelet
    EFE - París - 20/02/2007

    El tenor y director de orquesta Plácido Domingo, y el director del Teatro del Châtelet, Jean-Luc Choplin, han anunciado el próximo estreno de la versión operística de La Mosca (The Fly), con música de Howard Shore. Se trata de una nueva ópera cuya versión escénica correrá a cargo del canadiense David Cronenberg, quien llevó al cine una película de ciencia-ficción y de terror con este mismo título, que era a su vez un remake de la primera que había dirigido Kurt Newmann en 1958, con Vincent Price como protagonista.

    Domingo dirigirá la orquesta de este sueño musical de Shore, compositor de la trilogía de El Señor de los Anillos (2001-2003), El silencio de los corderos (1991) o Infiltrados (2006). El estreno mundial de la obra está previsto el 1 de julio de 2008, en el Teatro del Châtelet, y dos meses después, el 7 de septiembre, en la Opera de Los Ángeles que dirige Plácido Domingo, han adelantado en rueda de prensa los principales promotores del proyecto.

    La idea de trasladar a la lírica la tragedia del científico cuyos experimentos terminan convirtiéndole en una espantosa mosca asesina fue del propio Shore, ha explicado el cantante, abierto partidario de crear nuevos repertorios, como intérprete, pero también como director de la Ópera de Los Ángeles y de la Ópera Nacional de Washington. "Teníamos con él una cita en Los áÁgeles, porque estamos muy interesados en hacer creaciones", y Howard Shore "nos dio la idea de La Mosca, que fue ya un filme de éxito en su día y creo se quedó en su cabeza, pues desde entonces quiso hacer una ópera sobre ese tema", ha recordado.

    "Es realmente un tema muy duro, una obra muy negra, pero quise complacer a Howard (Shore), quien soñaba con crearla", ha añadido el director, quien ha viajado a París durante unas horas aprovechando el descanso entre las representaciones del Cyrano de Bergerac, estrenado el pasado domingo en el Palau de les Arts de Valencia (este de España).

    La ópera "tiene un repertorio extraordinario" y hay unas 20 o 25 que son de éxito seguro, "que se pueden catalogar como 'A', porque van a vender siempre, cante quien cante: son Aida, Don Giovanni, Madama Buterfly, La Boheme, Tosca, Carmen…", ha recordado Domingo. "Todo ese repertorio sabemos que lo vamos a vender", pero luego, "hay tantísimas óperas", ha resaltado Domingo, quien dijo haberse esforzado siempre, a lo largo de toda su carrera, en "ampliar el repertorio" y hacer óperas "que el público no conoce", muchas de ellas olvidadas.

    Sin olvidar, ha precisado, lo importante que es "tener óperas nuevas", dar a conocer nuevos compositores, algo que en calidad de director de teatro considera "un deber". Audaz objetivo que cumplirá a la perfección en The Fly, ópera inspirada en la novela que el autor francés George Langelaan escribió en 1957. Así, en cierta forma, ha resaltado Jean-Luc Choplin, la obra vuelve a Francia y retorna a su lugar de origen.

    Visiblemente encantado y "orgulloso" de ver al Châtelet "asociado en esta aventura absolutamente formidable", su director ha resaltado que la iniciativa fue "de Plácido Domingo y la Opera de los Ángeles". De ahí surgió esta colaboración entre Los Ángeles y París que "es algo mágico para nosotros" ha añadido el tenor._



  • Ahí tenéis a Harry, que nos ha crecido mucho, y hasta está dispuesto a medirse como actor en un escenario del West End y enseñar su verdadera varita mágica en "Equus" de Peter Shaffer. Debe de estar harto de tanto polvo de estrellas, y querrá que se le empiece a asociar con otro tipo de polvos más terrenales, pero no creo que eso a la Warner le haya sentado demasiado bien.
    El papel del psiquiatra que hicieron Anthony Hopkins y Anthony Perkins en Broadway (y Richard Burton en la película de Sidney Lumet) lo interpreta su tío Vernon en la ficción potteriana, Richard Griffiths. Así que todo queda en familia…



  • Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, o más bien que me parece que hoy sale a la venta el nuevo disco de Arcade Fire (aunque, por lo visto, ya lo tenéis tod@s más que filtrado, sorbido, digerido, asimilado, y algun@s hasta cagado), vamos a decir una oración -copulativa, a ser posible- por el suicidado autor de la novela del mismo título (escrita a los dieciséis años), y al que ya casi todos conoceréis por otra de la que hablasteis aquí hace tiempo, creo: "La (descojonante) conjura de los necios".

    También hay una peli de Terence Davies basada en ella, con la siempre espléndida Gena Rowlands, pero no la he visto y tengo entendido que es bastante mala.

    Es que, consultando cosas sobre John Kennedy Toole, se me ha disparado la neurona al acordarme de que el escritor famoso que lo descubrió (gracias a la insistencia "póstuma" de su madre) fue precisamente Walker Percy, el autor de "El cinéfilo", una novela ambientada en Nueva Orleans que traduje hace muchos años, y que en España pasó sin pena ni gloria aunque no estaba nada mal.
    Curioso cómo se acaban entrecruzando siempre los hilos. Y no sólo cómo se entrecruzan, sino cómo intercambian su dirección. El autor antes menospreciado es hoy reconocido, tras su muerte, en todo el mundo; y en cambio, al que tuvo reconocimiento en vida ya no lo recuerda prácticamente ni Dios.
    En fin, meditemos, herman@s: polvo somos, y en polvo nos hemos de convertir…

    P.D.: Me cago en Satanás. Debo de ser burro de caray. ¿Alguien me puede decir cómo coño se pueden subir las fotos una al lado de la otra, para no ocupar tanto espacio en este maldito post? Juro sobre el ardiente neón que me arrepiento del tamaño de la de Harry.



  • Rindo humilde homenaje a José Luis Coll, fallecido hoy, del que mentiría si dijera que lo he conocido mucho. Desde luego, lo recordaré como alguien a quien no he visto reír jamás pero que ha sabido hacer humor con dos piedras y sin meterse con nadie. Sí que conozco este libro, El diccionario de Coll
    ,

    que es un descojono, sobre todo para los amantes de los juegos de palabras.
    Descanse en paz.



  • un gran recuerdo para Coll

    su gag con el agua es de lo mejor que se ha visto nunca en TV

    http://www.youtube.com/watch?v=Vnq54Ewtuxo

    in memoriam



  • Me he perdido 20 minutos y seguro que eran los que hablaban de la Velvet.

    Acaban de hacer el reportage de 65 cumple de Lou Reed en el 33. Muy guapo.



  • Pues si Maurici, eran sobre la Velvet…



  • @Trinxo:17mksfju:

    Pues si Maurici, eran sobre la Velvet…

    ¿Por aquellas cosas de la vida, no lo habrás grabado? Que si me lo pasas te invito a una birrilla.



  • Pues va a ser que no Maurici, em sap greu… No tengo video y mi tele es de madera (y no va en coña).



  • Ha sido muy guapo el reportaje, lo he pillado de casualidad. Y lo siento pero no tengo video Maurici, a ver si algún ángel de la guarda postmoderno lo cuelga.